En los últimos años, se ha experimentado un aumento considerable del interés por la práctica de la hipnosis. Por este motivo, la Asociación para el Avance de la Hipnosis Experimental y Aplicada y el Grupo de Trabajo de Hipnosis Clínica de la Sección de Psicología Clínica y de la Salud del COPC organizaron la Jornada Hipnosis: Avances en Investigación y Aplicaciones los pasados días 27 y 28 de noviembre de 2015 en el Colegio Oficial de Psicología de Cataluña.

La conferencia inaugural de las jornadas corrió a cargo del Dr. Michael Heap, al que le hemos preguntado sobre la práctica de la hipnosis. El Dr. Michael Heap es psicólogo clínico y forense y profesor honorario de Psicología en la Universidad de Sheffield. Se le considera uno de los más prestigiosos expertos en el campo de la hipnosis en diferentes ámbitos: teórico, investigación, práctica clínica y forense y asuntos legales.

#1. ¿La hipnosis es un placebo psicológico o una terapia psicológica completa?

Michael Heap: Como todo tratamiento médico o terapia psicológica, hay siempre la posibilidad de algún efecto placebo pero, de hecho, es difícil distinguir el efecto específico de una terapia psicológica del efecto placebo. Esto es así porque un importante componente de cualquier terapia psicológica es la creación de esperanza y expectativas y la reafirmación de que se está haciendo alguna cosa para ayudar al paciente a encontrarse mejor. Esta es una parte importante del efecto placebo. Por lo tanto, un tratamiento hipnótico muy simple como puede ser hipnotizar al paciente sugestionando repetidamente que él se encontrará mejor, se sentirá más seguro, dejará de fumar, etc., si finalmente funciona, será analizado como un placebo.

Hay alguna evidencia de que sólo llamando al tratamiento ‘hipnosis’ puede mejorar su efectividad. Aunque, a diferencia de muchos tratamientos médicos, con las terapias psicológicas normalmente no se da el caso de que el paciente sólo tenga que tomar el tratamiento y esperar simplemente a que éste funcione. El paciente está activamente involucrado en el proceso de recuperación o mejora. Por lo tanto, mientras que en algunas circunstancias puede ser útil evocar el concepto placebo para buscar una respuesta positiva del paciente al tratamiento, para la mayoría de casos no creo que sea útil una diferenciación en la terapia psicológica.

Y refiriéndonos a si la hipnosis es una ‘terapia psicológica completa’: en aquellos casos en los que la terapia consiste sólo en una inducción hipnótica, las sugestiones terapéuticas (incluyendo las sugestiones post-hipnóticas) y la práctica de la autohipnosis, entonces se puede describir como una ‘terapia psicológica completa’. Pero lo más habitual es que la hipnosis sea sólo una parte del programa de tratamiento que nosotros introducimos en la terapia cuando creemos que puede ser útil.

#2. ¿Sugestión, ritual o conjunto de prácticas, cuál de estas tres palabras define mejor la hipnosis?

M.H.: Bueno, como siempre digo, depende de lo que quieras decir con hipnosis. Cuando escribo un informe para los juzgados en un caso que involucra hipnosis, he de precisar la definición. Y creo que la mejor que tenemos, la que distingue la hipnosis de los otros procesos psicológicos, es aquella que describe la sugestión y la respuesta del individuo, por ejemplo, ideas e imágenes que tienen el objetivo de crear en el sujeto experiencias reales que parezcan involuntarias y que no son el resultado de una estrategia cognitiva deliberada. Por tanto, la definición sería sugestión y sugestionabilidad. Entonces se puede añadir algún aspecto sobre el rol de la inducción hipnótica que, para la mayoría de la gente, es el ritual que conduce hacia un aumento de la sugestionabilidad.

#3. ¿Hipnosis experimental versus hipnosis clínica, son diferentes o complementarias?

M.H.: Son esencialmente diferentes con sólo algunas áreas de coincidencia (sesiones individuales de intervención con la voluntad de ayudar a los pacientes a salir adelante con su proceso médico o dental doloroso). La hipnosis experimental es, para la mayor parte, investigación de la sugestión en sujetos no pacientes en el laboratorio psicológico. Los resultados observables dependen de la sugestionabilidad medida de los pacientes.

Por supuesto, un terapeuta en la clínica debe hacer exactamente lo mismo que un investigador en un laboratorio con el mismo efecto (levitación del brazo, disminución de la sensibilidad en las manos, amnesia post-hipnótica, etc.) Pero los resultados que se observan en la hipnosis clínica (por ejemplo, la efectividad en el tratamiento) son sólo un poco dependientes de la sugestionabilidad medida de los pacientes. Por lo tanto, algo diferente de lo que pasa en la clínica, pasa al laboratorio.

#4. ¿Cuál es el estatus de la práctica de la hipnosis entre los profesionales de la psicología?

M.H.: En el Reino Unido hay un gran sector privado preparado que no incluye psicólogos clínicos, médicos ni psicoterapeutas que estarían cualificados para ejercer en el National Health Service. Entre estos profesionales, sólo unos cuantos usan la hipnosis en su trabajo. En nuestras universidades sólo tenemos un pequeño número de investigadores interesados en la hipnosis.

#5. ¿Cómo influye el control y la presión social en un paciente que se encuentra en los primeros estadios del tratamiento con hipnosis?

M.H.: No estoy seguro de que los estadios de tratamiento sean un factor significativo. El origen del control o presión social durante una sesión de hipnosis no recae en la hipnosis misma sino, exclusivamente, en el contexto en el que la hipnosis se desarrolla – por ejemplo, en la clínica, la relación paciente-doctor; en el escenario, la relación animador-público-voluntario, y en el laboratorio, la relación investigador-participantes. Aunque hay ciertos ingredientes en una sesión de hipnosis que pueden facilitar la coacción – por ejemplo, el hecho de que la persona tenga los ojos cerrados y que esté tumbada o apoyada en una silla. Los pacientes también pueden estar inseguros sobre lo que es la hipnosis y lo que es la práctica legitimada y están a la espera de hacer lo mejor para responder a las sugestiones e instrucciones hipnóticas. Se les anima a relajarse y dejarse llevar. Esto puede hacer que el paciente esté más afectado por el control y la presión social.

#6. No es cierto que los pacientes que se encuentran en un tratamiento con hipnosis normalmente se duerman o experimenten un estado pasivo, sino que están conscientes y son activos, ¿es posible, pues, experimentar algo parecido a la auto-hipnosis?

M.H.: No creo que haya mucha diferencia, si es que hay alguna, entre el que se consigue con una inducción hipnótica estándar y el efecto de otras formas de relajación. Gracias a la inducción, los niveles de actividad cognitiva (subjetiva y neuropsicológica) del sujeto disminuirán. Ellos pueden dormirse pero no es lo que se pretende (¡excepto en tratamientos para insomnio!). Suelen ser bastante pasivos (es decir, más dóciles y menos predispuestos a activar las propias respuestas comportamentales, por las razones expuestas anteriormente. Aunque, la evidencia es que cuando ellos están respondiendo a las sugerencias, a pesar de la sensación de involuntariedad, se requiere esfuerzo cognitivo. Y para la autohipnosis, no creo que sea esencialmente diferente de las otras formas de relajación.

* Entrevista original «Hipnosi: “la definició seria suggestió i suggestionabilitat”, segons el Dr. Heap» publicada por la revista PsiAra del Col·legi Oficial de Psicòlegs de Catalunya y traducida por María José Serrano, responsable del Grup de Treball d’Hipnosi Clínica de Catalunya.

* Fotografía tomada en un momento de las Jornadas. De izquierda a derecha: María José Serrano, Michael Heap y José Fernández, quien realizó la traducción consecutiva de la ponencia.