“En 1829, Cloquet, realizó las primeras intervenciones quirúrgicas con la utilización de la hipnosis y poco tiempo después Foissa realizo los primeros partos sobre efectos de analgesia hipnótica.
Entre los años de 1880 a 1890, fueron muchas las tentativas de aliviar los dolores que las grávidas sienten durante el parto […]
Desde el inicio del siglo XX encontramos relatos en la literatura de partos realizados sobre el efecto de hipnosis en países como: Alemania, Inglaterra, Austria, Rusia y Estados Unidos de América. Después de la primera guerra mundial aparecen los primeros relatos realizados por investigadores alemanes sobre este importante tema de la hipnosis.
Entretanto fue en la República Sovietica Socialista que el método se desenvolvió con mayor adicción, y en 1902, en 20 mujeres de un grupo de 28 que habían sido aceptadas para hipnotizarlas consiguieron tener sus partos sin sentir dolor. A pesar de este éxito el método continuaba empírico y con pocos adeptos.
Entre los años 1923 a 1930 también en Rusia el parto sobre los efectos de la hipnosis encontró varios adeptos.
En esa época Velvovski desarrolla su famoso método psicoprofiláctico para facilitación del parto, basado en la teoría de Pavlov, quien no simpatizaba con la hipnosis pero que la tomaba como base en su teoría. Los trabajos de Pavlov confirieron base científica a la hipnosis, a partir de sus experiencias con animales. Según este investigador, existe poca diferencia entre la sugestión de vigilia (sugestión con la persona despierta) y la hipnosis.
Por definición, la hipnosis es un estado intermedio entre la vigilia y el sueño, permaneciendo en el córtex del hipnotizado, puntos vigilantes que permiten una estrecha relación entre el hipnotizador y el hipnotizado.
A partir del año 1920, Platonov comienza a aplicar esta técnica de hipnotismo en el momento del parto. En colaboración con Velvovski estudiaron también la posibilidad de aplicar la sugestión y la hipnosis en operaciones quirúrgicas, en Obstetricia, en Ginecología y en otras áreas también quirúrgicas.
Por su lado en la misma época. Platonov y Nicolaiev conseguían que mujeres entrenadas previamente tuviesen sus partos en forma consciente, bajo la influencia que denominaron post-hipnótica.
Posteriormente Vigdorovitch obtuvo 80% de éxitos en alivio de los dolores, en 4.000 partos colocando a las mujeres en estado consciente o semi-inconsciente.
En el año 1938 Skrobanski comienza a emplear la sugestión en las clínicas de pré-natal, independientemente del método sugestivo utilizado durante el parto. Skorobanski postulaba que la mujer preparada con su método y que lograba tener confianza en si misma, los dolores del parto eran mejor tolerados, por cuanto la mujer convencida de la imposibilidad de la ausencia de los dolores sentiría dolor, sea cual sea el método utilizado.
A pesar de todas las experiencias realizadas, el método, denominado de hipno-sugestión por Velvoski, no tuvo aplicación generalizada. Entretanto estos avances fueron la base para la próxima etapa, denominada de ‘psicoprofilaxia’, principal recurso utilizado para la remoción de los dolores del parto.”
Referencia bibliográfica:
Sabatino, H. y Nogueira, S. (2004). Obstetricia en el último milenio. En J. Cortés (Ed.), Obstetricia general (pp. 22-23). Madrid: Ramón Areces.